Mes: abril 2015
Pedaleando que es gerundio!
Málaga
Preparados, listos… Vidorra!! Con las pilas cargadas en plena Semana Santa, nos escapamos a hacer una rutita en bici por La Gran Senda de Málaga. Comenzamos ataviados con gorras, protección solar y por supuesto, nuestras bicicletas para recorrer desde La Cala del Moral hasta el Muelle Uno.
El paseo por la costa es sencillamente delicioso. No hace falta salir a la carretera, ya que todo el trayecto discurre por el paseo y el carril bici.
Atravesamos el último barrio malagueño, La Araña, que frente a su imponente fábrica de cemento, se erige como un pueblito de estrechas y coquetas calles blancas. Seguimos el sendero hasta llegar al Peñón del Cuervo, uno de nuestros rincones favoritos, donde las barbacoas improvisadas empiezan a encenderse y numerosos grupos de familias y amigos se van concentrando.
Llegamos hasta el Candado y de allí al paseo marítimo del Palo. El bullicio nos acompañará hasta el final de la ruta. Chiringuitos llenos, playas a rebosar y aunque el agua está más que fría, los niños no se resisten al primer baño de la temporada!
Ateavesar Pedregalejos es otra odisea, así que decidimos parar y tomar alguna que otra instantánea ahora que el cielo se va nublando.
La primera para parada para reponer fuerzas es en uno de los chiringuitos recientemente reformados del paseo maritimo de la capital. Sin lugar a dudas entre los platos de boquerones fritos que nos encantan y las almejitas, nos quedamos con los mejillones al Pil Pil, sí sí, esta versión del clásico plato está tremenda!
Terminamos el paseo llegando a Muelle Uno, donde encontramos uno de los últimos iconos de la ciudad: el Centro Pompidou.
En nuestro camino de vuelta solo hacemos un par de paradas. la primera, para disfrutar de un refrescante daikiri de fresa!
Y la segunda, para disfrutar del atardecer que se nos regala!
Así da gusto disfrutar de las vacaciones, o no vidorr@s??